
Su carlino ha pasado de cachorro a pug adulto en un tiempo récord. Los dueños de las mascotas generalmente se sorprenden de que su Pug sea considerado un carlino adulto mayor a la edad de nueve años.
Su Pug puede exhibir su personalidad juguetona y dulce durante toda su vida, pero es importante darse cuenta de que su cuerpo está envejeciendo y necesita cuidados específicos.

A veces los carlinos más viejos pueden empezar a mostrar cambios de comportamiento que empezarán a ser sutiles y aumentarán con el paso del tiempo. Cuidar a un Pug anciano es fácil con sólo especial atención. A continuación te damos algunos consejos para cuidados de pug.
Como mantener mejor la salud de tu perro mayor
Análisis periódicas en perros
✔ Con exámenes geriátricos para tu carlino, una vez que tu doguillo llegue a lo que se considera su último año, el veterinario comenzará exámenes especiales para ayudar a mantener una buena salud.
✔ Estos exámenes se llevan a cabo durante los chequeos regulares, por lo que no es necesario tener una cita por separado. Los exámenes geriátricos para los Pugs incluyen análisis de sangre, examen físico práctico y pruebas especializadas como un electrocardiograma.

Ejercicio en perros ancianos
✔ El ejercicio en carlinos es muy importante durante los años de juventud de tu Pug, en esa época ellos son más enérgicos y se ponen muy contentos al dar largos paseos contigo.
✔ Sin embargo, cuando su Pug se hace mayor, tendrás que seguir dándole ejercicio como caminatas pero con pausas y haciéndolos más cortas.
✔ Usted tendrá que reemplazar las caminatas larga por dos o tres paseos cortos a lo largo del día, esto permitirá menos tensión en las articulaciones al mismo tiempo que también le proporcionará un tiempo de descanso entre las sesiones de caminata.
✔ Una caminata para un carlino seniors debe incluir un calentamiento de cinco minutos a un ritmo lento.
✔ Luego, gradualmente, pasar 20 minutos a un ritmo rápido y finalmente disminuir el ritmo de enfriamiento durante unos cinco minutos. Durando cada paseo unos 30 minutos es suficiente.

Comportamientos normales en perros viejos
Si tu perro pug adulto, tiene problemas de salud que le impiden pasear o ejercicio diario, consulta con el veterinario para obtener consejos útiles sobre cómo darle ejercicios de buena calidad que satisfaga las necesidades específicas de salud de tu carlino.
A medida que pase el tiempo y tu perro se haga más mayor, demostrará la falta de entusiasmo para saltar sobre muebles como la cama y el sofá. Aunque hayan pasado su vida disfrutando de muchas siestas en ellos, ahora pueden necesitar ayuda para levantarse y subirse a ellos.
Muchos dueños prefieren coger a su Pug y colocarlo ellos mismos encima del sofá o la cama para más comodidad del animal, otros prefieren que su Pug mantenga su independencia y les proporcione rampas o escalones.
Hay gran variedad de rampas y escaleras para perros que les facilitaran a sus carlinos poder subir y bajar sin necesidad que usted tenga que ayudarlo.
Estos muebles de mascotas para casa ayudan a la movilidad y son especialmente útiles para los perros que sufren de daño en el nervio espinal, debilidad, artritis y problemas de cadera.

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Cuidados en perros pug ancianos
Los cuidados para un pug mayor, también conocido como carlino viejo, requieren atención especial para asegurar su bienestar. El pug viejito puede presentar una serie de necesidades específicas que deben ser abordadas de manera adecuada. Es importante comprender que los perros pug viejos, al igual que cualquier otro perro anciano, pueden experimentar cambios en su salud y comportamiento. Por lo tanto, es fundamental proporcionarles los cuidados necesarios para garantizarles una vida cómoda y feliz.
Uno de los aspectos más importantes en los cuidados de un pug viejo es mantener un control regular de su salud. Los perros pug viejos son propensos a ciertos problemas de salud, como la displasia de cadera y la obesidad. Es recomendable realizar visitas periódicas al veterinario para realizar exámenes de rutina y evaluar cualquier cambio o síntoma preocupante. Además, se debe prestar atención a su alimentación, asegurando una dieta equilibrada y adecuada para su edad y condición física.
El ejercicio también desempeña un papel clave en los cuidados de los perros pug viejos. Aunque es normal que su nivel de actividad disminuya con la edad, es importante proporcionarles ejercicio regular para mantener su salud y bienestar. Paseos cortos y tranquilos, adaptados a sus capacidades físicas, son ideales para mantener su movilidad y estimular su mente. Sin embargo, es fundamental evitar ejercicios intensos o extenuantes que puedan poner en riesgo su salud.
Además de los aspectos físicos, es esencial prestar atención a los cambios en el comportamiento de los pug viejos. Pueden volverse más tranquilos y menos enérgicos, o incluso pueden mostrar signos de dolor o malestar. Es importante estar atento a estos cambios y buscar la atención veterinaria adecuada si es necesario. Proporcionarles un ambiente tranquilo y confortable, con camas suaves y cálidas, puede ayudarles a descansar y relajarse.
Finalmente, el cariño y la atención son fundamentales en los cuidados de los pug viejos. Dedicar tiempo de calidad para interactuar y jugar con ellos fortalecerá el vínculo emocional y les brindará seguridad y felicidad. Recordemos que el pug adulto han sido compañeros leales durante muchos años y merecen ser tratados con amor y respeto.
En resumen, los perros pug viejos, también conocidos como carlinos viejos, requieren cuidados especiales para garantizar su bienestar. Controlar su salud, proporcionarles ejercicio adecuado, estar atentos a los cambios en su comportamiento y brindarles cariño y atención son aspectos fundamentales en su cuidado. Con estos cuidados, podemos asegurarles una vida cómoda y feliz a nuestros queridos pug viejos.
Cuidar a un perro pug viejito o un pug anciano requiere que sus dueños hagan algunos cambios con respecto al cuidado previo que siempre han mostrado hacia ellos. Estos pueden parecer un mundo en los últimos años de su carlino.
Siempre alimente a su perro pug adulto con una dieta saludable que se adapte a su edad y estado de salud, así como con abundante agua fresca. Estos consejos ayudarán a tu perro a disfrutar de sus últimos años vivo, sano y con alegría.
Este artículo no tiene la intención de diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad. La información en este sitio web no pretende reemplazar una relación personal con un profesional de la salud calificado. Si tu perro sufre alguno de estos síntomas, vaya a su veterinario de confianza.